Dianthus caryophyllus

Dianthus caryophyllus

Su nombre científico es Dianthus caryophyllus, pero se le conoce comúnmente como “Clavel” y pertenece a la familia de las cariofiláceas, donde es la especie más conocida. El clavel es una flor cortada especial para adornar en ramos florales o coronas. Los claveles son flores hermosas y coloridas, y son junto con las rosas el típico signo del amor puro y sincero, así como de los sentimientos internos.

Una de las ventajas que ofrece el clavel frente a otras plantas, es que requiere de cuidados muy mínimos y que una sola planta puede cautivarnos con la gran cantidad de flores que produce, siendo realmente impresionante e ideal para adornar rincones del jardín, macetas y parterres, contando además con una adaptabilidad muy grande.

Detalles del Dianthus caryophyllus

Detalles del Dianthus caryophyllus

Detalles del Dianthus caryophyllus

 

Esta planta perenne es de las más conocidas por los amantes de la jardinería y de las flores, puesto que son empleadas en gran medida como flor cortada para ofrendas florales, y celebraciones como el día de todos los santos. El clavel aparece libremente en Europa, especialmente en la Península Ibérica donde podemos apreciarlo en ocasiones en matorrales y campos abiertos.

La base de los tallos del clavel es semileñoso, mientras que el resto tiene color verde, alcanzando alturas de hasta un metro de longitud; sin embargo, lo más normal es que en los ejemplares cultivados alcancen ocasionalmente los 60 centímetros. Por otro lado, las hojas son alargadas y muy delgadas, lineares, planas y blancas con un tamaño que puede superar los 20 centímetros de largo

Ahora bien, no podemos hablar del clavel si no mencionamos sus hermosas flores compuestas, las cuales crecen terminales en la mayoría de los ejemplares, pero en aquellos conocidas como clavelinas crecen de manera axial y en grupos; son muy vistosas y de colores vivos, prácticamente siendo cualquier color, pero las más comunes son los de color rojo, rosado, blanco o los jaspeados. Tienen un tamaño que ronda los 5 a 6 centímetros de diámetro máximo, con pétalos con bordes aserrados muy característicos.

Las fragantes flores del clavel atraen a gran cantidad de polinizadores y, tras encargarse de dicha polinización, se producen los frutos que son secos y conocidos como aquenios, siendo de fácil propagación gracias a que las semillas se dispersan con facilidad.

Cuidados del Dianthus caryophyllus

Cuidados del Dianthus caryophyllus

Cuidados del Dianthus caryophyllus

 

Los claveles son de las plantas florales ornamentales más cultivadas en el mundo; y, por ende, son de las más conocidas. Es por esto que si deseas plantar un ejemplar de esta clase hay que conocer una serie de cuidados básicos a fin de mantener correctamente a nuestras plantas:

  • Los claveles crecen bien a pleno sol y que, de hecho, de faltarles este vital recurso, se marchitan y mueren. Además, de ser insuficiente, la planta crecerá apática y lo más probable es que no genere flores.
  • Requieren de un suelo que sea poroso, suelto y de preferencia fresco. Debe estar bien drenado puesto que las raíces del clavel pueden dañarse si se encharca.
  • Se debe abonar semanalmente durante la floración en verano; se usa principalmente fertilizantes líquidos, empleándose también abonos orgánicos como estiércol. En definitiva, tiene un altísimo requerimiento de nutrientes para crecer bien.
  • Prefiere los climas frescos, perjudicándole los jardines veraniegos. La temperatura no debería subir de 25°C durante el día.
  • Las podas pueden hacerse para darle vigor, forma y eliminar tallos problemáticos de la planta. Generalmente, se hacen tras la floración principal, pero pueden hacerse en cualquier época del año.
  • El pH del suelo deberá variar entre los 6,5 a 7,5, o sea tratar que sea lo más neutro posible.
  • El riego debe ser generoso y constante puesto que los claveles absorben mucha agua; sin embargo, nunca se debe encharcar. A principios de verano habrá que regarlas diariamente.

Curiosidades del Dianthus caryophyllus

Se considera que, dependiendo del color de la flor, posee un significado diferente, así pues, el rojo representa el amor y la pasión, el blanco la pureza y el rosa la amistad sincera. A nivel mundial, el cultivo del clavel para su empleo como flor cortada le ha dado el título de una de las flores más espectaculares que hay y de las más plantadas a nivel industrial, junto con los tulipanes, rosas y girasoles. Por último, los principales países productores de claveles son Colombia, España y Estados Unidos.