Fittonia verschaffeltii

Fittonia verschaffeltii

La planta Fittonia verschaffeltii es una especie originaria de América del Sur; precisamente de Perú, Brasil, Colombia y Ecuador; siendo encontrada abundantemente en las selvas tropicales donde la humedad sea alta. También se le conoce como “Fitonia”, y es una excelente planta para interiores. Actualmente, es seleccionada por su alta rusticidad, capaz de ofrecer un porte ornamental muy llamativo.

Por otra parte, podemos apreciarle en las distintas floristerías o diversas tiendas que se especialicen en la venta de plantas ornamentales. Cabe destacar que, a pesar de poseer flores poco vistosas y de tamaños muy pequeños, pueden ser usadas como acompañante de otras flores para la formación de arreglos florales aptos para cestas decorativas.

Características de la Fittonia verschaffeltii

Características de la Fittonia verschaffeltii

Características de la Fittonia verschaffeltii

 

Lo primero que podemos presenciar en este ejemplar son sus hojas perennes, las cuales tienen un diseño muy exótico y curioso, ya que presenta nervios blancos muy notables. Además, aparecen de distintos colores, pues suelen ser verde oscuro, rojo o rosa. En cuanto a su estructura, son ovaladas, enteras y su medida ronda entre los 3 y 5 centímetros de largo.

Si nos basamos en el aspecto general, se trata de una planta de poco tamaño, la cual posee un porte rastrero y un tallo con pelusillas que, normalmente, no se puede observar con exactitud, debido a que presenta un follaje muy denso y abundante que suele cubrirlo por completo.

Presenta flores de color amarillas poco llamativas que aparecen en forma de espiga, las cuales suelen ser muy perjudicables para el ejemplar, ya que absorben los nutrientes que necesitan las raíces y las hojas. Por esto último, se recomienda su extracción en el momento en que se puedan presenciar.

Cuidados de la Fittonia verschaffeltii

Cuidados de la Fittonia verschaffeltii

Cuidados de la Fittonia verschaffeltii

 

A pesar de tratarse de una especie sumamente rústica, nos encontramos con una planta relativamente difícil de cuidar, por lo que debemos tomar en cuenta diversos factores para asegurar una larga vida de la especie. Estos son:

  • Su ambiente debe ser iluminado, donde pueda recibir rayos solares de forma indirecta. Además, puede crecer muy bien bajo la semi sombra, por lo que es un excelente ejemplar para espacios de interiores.
  • Se trata de una especie tapizante, cuyas raíces son muy pequeñas, motivo por el cual puede crecer perfectamente en macetas que tengan una medida aproximada de 9 a 11 centímetros de diámetro.
  • En cuanto a su humedad, es recomendable que en temporadas de calor se realicen abundantes pulverizaciones en sus hojas; sobre todo con agua proveniente de las lluvias. No obstante, se puede optar por agua obtenida de grifos siempre y cuando esta se mantenga en el exterior por un período de al menos 24 horas. Asimismo, su riego debe ser abundante, pero sin producir encharcamientos.
  • Es una planta que necesita de temperaturas cálidas, ya que es proveniente de aquellos bosques tropicales húmedos, por lo que se recomienda mantener el ejemplar en temperaturas que ronden entre los 20 y 25ºC. Sin embargo, puede tolerar grados ligeramente superiores.
  • El sustrato debe ser turboso, drenado y ligero, de tipo vermiculita, fibra de coco o simplemente arenoso. El cual puede recibir abonos minerales no calcáreos para un mejor crecimiento, y debe aplicarse durante las temporadas de primavera y verano, durante un lapso de cada 15 días.

Problemas de la Fittonia verschaffeltii

Diversos problemas suelen afectar a esta planta. Normalmente, ocurren por una mala elección del ambiente o, simplemente, por un abuso o falta de humedad. Dichas consecuencias son:

  • En algunas ocasiones puede ocurrir que el hermoso, denso y abundante follaje de nuestro ejemplar se presente separado y de tamaños muy pequeños. Esto ocurre como consecuencia de la falta de luz; razón por la que se debe considerar ubicarle en un mejor lugar con acceso indirecto del sol.
  • Las hermosas y llamativas hojas pueden perder su brillo, presentar tonos marrones o, en algunos casos, las más bajas suelen cambiar su color de verde a un raro amarillo. Por lo general, dichas consecuencias ocurren por el abuso o falta de humedad, por lo que se recomienda revisar el sustrato en todo momento para evitar encharcamientos o sequedades excesivas, así como también, tener cuidado con el exceso de agua en las hojas.
  • Cuando el ambiente se mantiene muy seco, las hojas suelen presentar una textura muy arrugada, así que se debe estar al tanto de pulverizar las hojas moderadamente.
  • Así como muchas plantas de interiores, suelen perder sus hojas de manera muy lenta o hasta progresivamente. Por lo general, cuando abundan vendavales muy severos, dichas hojas tienden a caer.

Finalmente, la planta suele ser atacada por la araña roja o pulgones, dando como consecuencia hojas de bajo color o con partes amarillentas. La solución más práctica radica en la aplicación de agua con jabón de potasa para finalmente acabar con dichas plagas.