Hinojo

El Hinojo es una planta herbácea que resalta por su aroma, uso en la gastronomía y por sus bondades medicinales. Los científicos lo conocen como Foeniculum Vulgare, con una familia extensa de más de 2500 especies y 250 géneros, todos descendientes de las Apiáceae.

El cultivo de Hinojo es originario de la zona meridional del continente europeo pero se conocen producciones en Murcia, Cataluña, Valencia y algunas provincias costeras andaluzas en España. La planta no alcanza más de 2 metros de altura, suelen confundirla con maleza puesto que prospera silvestre en zonas de poco acceso como cunetas, terrenos baldíos, cerca de las costas o a orillas de carreteras y caminos.

Sus hojas parecen plumas mientras que las flores resaltan con su atractivo color amarillo. La característica principal del Hinojo es su tallo y bulbo que posan en el suelo en forma de roseta. De los tallos salen ramas con al menos 50 flores que son cobijadas por delicadas hojas, éstas a su vez guardan semillas responsables del peculiar olor anisado que tiene el Hinojo.

Detalles del Hinojo

 

El Hinojo contiene una cantidad de componentes activos que le otorgan poderes homeópatas. Es rico en vitamina C, fibra, hierro, alanina, grasas, magnesio, cobalto y arginina. Resulta tener efectos digestivo ideal para eliminar las flatulencias y atenuar la inflamación en el abdomen. Asimismo calma la tos, ayuda a personas con problemas de obesidad, reduce los nervios, controla el proceso menstrual.

Se dice que es un excelente potenciador sexual natural, además estimula la secreción de leche en las mujeres lactantes, ayuda a controlar el colesterol y sirve también como relajante.se trata de antioxidante para frenar el envejecimiento prematuro.

Ahora tratemos al Hinojo como una planta herbácea que se aprovecha en el ámbito culinario con un auge que cobra fuerza con el tiempo. Para tal sentido se utilizan casi todas las partes con la raíz, por ejemplo se realizan ensaladas pero también son exquisitas al horno, gratinadas con queso parmesano o bechamel. Es un excelente acompañante para el pescado. Como condimento para panes, salsas, cremas, carnes y guisos, los aceites infuionados a base de Hinojo tienen mucha demanda.

Ahora, no sólo la industria farmacéutica se aprovecha de los beneficios del Hinojo, en el ámbito de la cosmetología también tiene una gran demanda y son apreciadas sus propiedades. El particular olor que tiene esta planta se útil para elaborar perfumes, cremas, jabones, loción para el cuerpo, pasta de diente y otros artículos de higiene personal.

Cuidados del Hinojo

 

Para aprovechar todos los beneficios que ofrece esta maravillosa planta es necesario proporcionar los cuidados mínimos al cultivo para que éste progrese sano. Seguir ciertos consejos no está demás así que a continuación los desglosamos.

• Prefiere los climas témplanos, aunque se adapta bien a los cambios de temperaturas.
• Se recomienda plantar Hinojo en un lugar con suficiente luz solar, para esta planta es vital.
• Prospera mejor en suelos arcillosos y arenosos preferiblemente con bue drenaje. No tolera los suelos ácidos.
• Es apropiado abonar el sustrato con estiércol y reforzarlo durante el verano con un abono mineral.
• Durante el verano el riego debe ser más frecuente. El resto del año debe disminuir su frecuencia pero es importante que la planta esté siempre húmeda sin llegar a encharcar.
• La mejor etapa del año para plantar Hinojo es durante la primavera.
• Es tolerante a cualquier tipo de temperatura menos las excesivamente frías.
• Se multiplica a través de las semillas, la mejor época es durante el otoño o en el invierno.

Problemas frecuentes del Hinojo

En general en una planta muy resistente a los ataques de las plagas y las enfermedades, sin embargo pueden aparecer algunos trastornos productos de los malos cuidados. En tal caso pudieran surgir los hongos más comunes en este tipo de cultivos como los son el Oídio y el Mildiu. Así como también puede ser atacada por el Pulgón áfido,que atacan las hojas pero también los brotes, estos últimos los prefieren en su edad tierna dejando a su paso devastación. Es fácil reconocer una hoja atacada por pulgones puesto que dejan marcas amarillas o verde pálido en los puntos de picadura. Para combatir este insecto en específico lo recomendable es rociar el cultivo con jabón potásico.