Pyrus cordata

Conocido como peral silvestre, peretero (castellano), makatza (euskera) y estripio (gallego). Es una planta pequeña muy común en zonas de malezas, la cual se cultiva por los múltiples usos que posee.

Conoce el pyrus cordata

Esta planta es una especie de peral silvestre, de porte normalmente arbustivo. Suele presentar una copa en forma de pino, dotando de sombra moderada al suelo; tiene un sistema de raíces muy resistentes; y produce frutos de tamaño moderado, comestibles, aunque algo más duros que los del peral común. Sus flores son muy llamativas, lo que le confiere un toque ornamental.

Detalles del pyrus cordata

Es un árbol de escaso porte, llegando a los 3-5 metros de altura, siendo un arbusto que en muchos casos es empleado para setos vivos. Ahora bien, si se le da la condición adecuada puede llegar a medir 15 metros de altura, aunque no es muy común que alcance tales tamaños.

Posee un tronco muy duro con corteza grisácea, presenta hojas alternas, con ligera forma de corazón y bordes serradas. Estas hojas son de un color verde oscuro, y al momento de florecer, produce inflorescencias de color blanco, con 5 pétalos y estambres de color rojos, que le dan la apariencia de ser flores manchadas. En lo respecta a su fruto, es de pequeño a moderado tamaño, un tanto amargo y duro, aunque es comestible.

En definitiva, se considera el antecesor silvestre de la mayoría de los perales comunes cultivados, y posee múltiples usos desde tiempos inmemoriales.

Sobre su ecología

Nativo de la zona mediterránea y de Asia occidental, donde crece de forma espontánea en matorrales y en zonas boscosas. Su crecimiento suele ser moderadamente rápido. El peral silvestre se caracteriza por su alta robustez, y su amplio sistema de raíces le permite sobrevivir en prácticamente la totalidad de los lugares de Europa.

Se propaga mediante semillas, estas germinan en la primavera y producen árboles que al cabo de pocos años estarán produciendo las pequeñas peras. Las semillas no son exigentes en cuanto a condiciones de germinación, aunque prefieren zonas levemente húmedas y con mucho sol para desarrollarse correctamente, normalmente están adaptadas para soportar el frío invernal.

Posee un amplio crecimiento vegetativo respecto a su follaje, sus hojas son caducas, por lo que una vez llegado el invierno las perderá, el peral silvestre puede soportar los inviernos más fuertes y los veranos calurosos. Sin embargo, rara vez suele encontrarse en latitudes muy al norte. Y antiguamente, era muy conocido por los romanos debido a su extensa distribución y frutos

Situación geológica del peral silvestre

 

Habita en la totalidad de la zona mediterránea y en zonas árabes de Asia, aunque también se ha reportado su presencia en el norte de África. También, es un ejemplar nativo del noroccidente de España, pero puede crecer en las zonas de Portugal.

Puede crecer en todo tipo de suelos, de hecho, es indiferente ante ellos, de allí su conocida robustez. Es muy común en zonas de matorrales, creciendo desde el nivel del mar, hasta aproximadamente los 1500 metros. Se puede decir que, para que el peral silvestre se desarrolle adecuadamente, este necesita de mucho sol, pues no tolera muy bien la semisombra en muchos de los casos. Por su escaso porte, normalmente se encuentra como arbusto.

Datos curiosos de peral silvestre

Su nombre científico deriva de la palabra latina “Pyrus”, nombre que le dieron los romanos y significa peral, mientras que la palabra cordata se refiere a sus hojas con leve forma de corazón. Una curiosidad de sus hojas es que estas poseen pelos finos y pequeños cuando son jóvenes, pero se les caen al crecer a su tamaño máximo.

Es conocido desde la antigüedad por sus frutos, estos suelen ser duros, pequeños y amargos si se comparan con los de los perales domésticos comunes. Estos frutos pueden comerse cocidos, aunque esa aplicación en cocina es muy limitada. Normalmente, al crecer de forma silvestre puede considerarse una mala planta, pero su madera muy dura es ampliamente apreciada en carpintería porque es fácil de pulir y suele usarse para elaborar instrumentos musicales.

Para concluir, la principal aplicación para las plantas de peral silvestre, es de servir de porta injerto para otros tipos de perales, bien sea de perales europeos comunes o de perales de variedades asiáticas, esto asegura plantas más resistentes, más productivas (por la mejor absorción que poseen sus raíces) y más pequeñas, lo que las hace más manejables y rentables.