Solanum rantonnetii

Solanum rantonnetii

La familia de las Solanáceas es nativa del continente americano, donde muchas de sus especies, en especial de los géneros Solanum y Capsicum son mundialmente conocidas porque algunas de sus especies se emplean como un alimento vital, en especial los tomates, las patatas, el pimiento y las berenjenas. Sin embargo, las solanáceas poseen muchísimas especies, y si bien muchas otras se les considera malas hierbas, existen algunas que son usadas como delicadas y hermosas plantas ornamentales.

El Solanum rantonnetii es una de las especies más empleada, la cual es nativa de América del sur; y específicamente, entre los países de Paraguay y Argentina, se le conoce como “Solano de flor azul”, e incluso como “Jazmín paraguayo” debido a que superficialmente recuerda a los jazmines debido a sus hábitos como trepadora y vistosas flores.

Características del Solanum rantonnetii

Características del Solanum rantonnetii

Características del Solanum rantonnetii

 

En primer lugar, esta planta se nos presenta como una trepadora que puede llegar a alcanzar los 2,5 metros de altura apoyándose en otras superficies; sin embargo, puede crecer también como un arbusto u arbolillo pequeño dependiendo de la cantidad de ramas que posea. Los tallos son de color verde y, como sucede con su primo la tomatera, son pilosos; es decir, presentan vellosidades pequeñas en toda su superficie incluyendo las hojas, aunque da la apariencia de terciopelo gracias a su pequeño volumen y tamaño.

Posee unas hojas alargadas y con forma oval, con color verde brillante muy llamativas; son pequeñas con un tamaño en torno entre los 5 a 12 centímetros generando múltiples tallos y hojas. En cambio, sus llamativas y hermosas flores tienen un diámetro de unos 5 a 6 centímetros pareciéndose a la de sus primas las petunias, de aspecto delicado y color azulado con múltiples tonalidades; el centro es de color amarillo donde se aprecia el polen con los pétalos soldados entre sí.

Las flores de esta especie son muy llamativas y hermosas, con un buen tamaño. Presentan tonalidades de azul llegando incluso hasta el magenta y, en ocasiones, algunos tonos morados; de allí viene su nombre común. Presentan un aspecto delicado capaz de cautivar a cualquiera.

Tras la polinización de las flores, se generan los frutos, que son unas bayas pequeñas, esféricas y de color rojo-naranja parecidos a pequeños tomates y, aunque no son comestibles, son alimento ideal para muchas especies de aves que usualmente se encargan de dispersar sus semillas a otras áreas.

Ecología del Solanum rantonnetii

La especie habita naturalmente en zonas con clima suave, fresco y subtropical en la zona encontrada entre el norte de Argentina y Paraguay. También se le ve en zonas costeras creciendo usualmente en zonas de matorrales, sabanas y claros de bosque. Si bien no es una especie alpina, crece normalmente en laderas de montañas y colinas.

De igual manera, se la puede encontrar habitando en altitudes comprendidas entre el nivel del mar y los 1200 metros aproximadamente; aunque es más común entre los 300 y 900 metros respectivamente.

Cuidados del Solanum rantonnetii

Cuidados del Solanum rantonnetii

Cuidados del Solanum rantonnetii

 

Esta planta suele adaptarse bastante bien a lugares con clima suave y fresco, e igualmente con climas subtropicales; no obstante, tolera muy bien el clima tropical siempre que se le proporcione una serie de cuidados. En definitiva, si queremos que nuestra planta muestre todo su potencial debemos cumplir con los siguientes requerimientos:

  • Para ubicar nuestro ejemplar de solano de flor azul hay que escoger una zona con el sol directo u algo de sombra, y que esté libre de la interferencia de grandes árboles y plantas frondosas que puedan robarle la luz, ya que es muy demandante en este aspecto.
  • Requiere de un buen suelo con gran cantidad de materia orgánica y un pH ácido para crecer bien, para eso debemos tratarlo con turba o estiércol de ganado para asegurar un buen resultado.
  • El abonado debe ser frecuente en épocas de floración, usualmente mediante humus de lombriz o mezclas orgánicas; debe aplicarse cada 3 semanas aproximadamente.
  • Requiere riegos moderados a intensos, dependiendo de la estación climática, eso sí cuidando de no encharcar el terreno o podríamos dañar sus raíces.
  • Las podas las haremos para darle forma y vigor; y son necesarias para controlar el crecimiento excesivo y las ramas débiles.
  • No resiste el frío ni las heladas, por ende, se desarrolla mejor en climas frescos y soleados; en invierno conviene tenerla dentro de casa y cerca de una fuente de luz.
  • Si bien sus semillas son el método natural de propagación, es algo laborioso emplearlo comercialmente por su bajo porcentaje de germinación. Para propagarla es recomendable cortar estacas que se dejaran en un sustrato abonado y fértil con suficiente humedad; considerando que este debe estar en una zona iluminada, pero lejos del sol directo.